Ya hace seis años me trajeron aquí motivos laborales. No ha sido tiempo bastante para acostumbrarme a llamar pueblos a las aldeas, pero si el suficiente para dejar de considerar personas a muchos de sus moradores. (más…)
Vivo y me siento sola, aunque, durante el día, en el trabajo, manos desconocidas se paseen por mi cuerpo hasta el punto de encender mis deseos más ocultos. (más…)
Estuviste siempre junto a mí atenta, cercana y vigilante. (más…)
De un tiempo a esta parte, he llegado a la conclusión de que todo lo inesperado tiene que ver con una extraña suerte de exactitud que comienza a sacarme de quicio. (más…)
“La vida te da sorpresas,
sorpresas te da la vida
de una canción de R. Blades (más…)