Resultados de búsqueda por: Fátima Ricón Silva

Isla desierta. Por Fátima Ricón Silva

  Talando las astillas de tu piel pierdo el tiempo, escalando por tus pensamientos me aburro y salto al abismo de mis propios pesares olvidando los tuyos.   Trozo de corcho sin sensibilidad, poroso, que te traspasa la fuerza sin dejar huella quedando vacío y desnudo ante la experiencia abrumadora que otros recabamos del caminar.   Sucio de humedad espiritual que te ablanda las neuronas restando cordura y conciencia a tus actos, que te divide la sabiduría en dos: lo que no sabes y lo que no quieres saber.   Explayado y ciego. ¡Pobre hombre descarnado! Poco comprendido, nada admirado,… Leer más

Ruina. Por Fátima Ricón Silva

  Un sudor amargo discurre por mis entrañas, lacerando, con lujuria, con engaños, mi frágil melancolía por creerte, por obedecer las sucias palabras que un día escupió tu tierna lengua.   Lobo con piel de cordero que me acosa desde el centro de una diana, y me hace sentir como la manecilla larga de un reloj, persiguiendo una historia a la que nunca pondré un final porque no llego a ninguna parte, caminando y comiendo golosinas sin sustancia.   Sobrealimentada de malas vibraciones y anoréxica de comprensión, me abandono a las ondas de un mar muerto, resbalando entre la sal… Leer más

Negro. Por Fátima Ricón Silva

El miedo, el misterio, la muerte, la noche.   Cuna del alojamiento de un feto, aura de las habitaciones del infierno, de la visión cegada por la luz, de la boca del lobo.   Seno del interior de algún sueño, del calor de un horno cenizo, de un corazón siniestro, de unas palabras asesinas.   Rugido de una novela, de un bloque de mármol, de la piel de la envidia, de una voz cantora.   Color del agotamiento pesimista, de un pacto roto, de un anuncio ácido, de una crítica sin recursos.   Negro.   Fátima Ricón Silva Leer más

Un solo de trompeta. Por Fátima Ricón Silva

Cierro el sobre del día e introduzco dentro todas las experiencias, cansancio, alegría y energía consumidas. Ahí se queda para la colección de vida.   Deseo obedecer a Morfeo que me llama con su música celestial, y que con una armonía orquestal me incita a dormir.   Me envuelvo entre las sábanas con aroma a jazmín y me aovillo en una madeja de piernas y brazos con mi amor.   Su respirar agitado y la dulce música del sueño me relajan y quedo rendida ante el narcótico gesto de dormir, y pasan las horas.   ¡De repente un sonoro estruendo… Leer más

Bagaje del camino. Por Fátima Ricón Silva

Vidrio agriado por la lluvia, templado por el llanto de unos besos, cristal encaprichado de las vetustas telarañas que tejen el entramado sobre el que ejerces de equilibrista.   Largo camino sucio de esquirlas llenas como gotas de mentiras. Te golpean. Son tus huellas. Es tu vida.   Un roto más en el viaje que zurces con el hilo rebosante de otros rotos que antes cultivaste, en otras odiseas, en otros disparates.   Calendario de colores, días negros o repletos de flores, las cuatro estaciones recorriendo un cuerpo ora frío, ora viento, ora calor del sentimiento.   Es el peso… Leer más

Desidia. Por Fátima Ricón Silva

   Un turbio letargo me entretiene, pasan las horas, exhumando rosas con espinas, levando un polvo esquilmado que me va minando.   Me doy de bruces con el destino, aún no estaba preparado para afrontar el exterminio de una dicha regalada. Alienado y decaído, opto por pactarme vencido. No es cobardía. Es un temor que me domina.   Un recelo que escupe toda la vida misma. Un letargo turbio que me entretiene.   ©Fátima Ricón Silva Leer más

¿Suicidio de una parte de nadie? Por Fátima Ricón Silva

Nadie es una mujer qué es alguien. Busca algo que le aporte más vitalidad, o mejor dicho la vitalidad que necesita para ser ella misma. Se encuentra encerrada en un cubo hermético de oro. Un día tras otro no para de darse cabezazos contra los muros de ese espacio del que no le dejan salir. No le importa, los moratones figurados que se marcan en su estado de ánimo son lo de menos. ? Lo de más es la dificultad para respirar. Lo de más es la imposibilidad de obtener lo que necesita para ser ella. Los que la conocen,… Leer más