Mujer, madre y trabajadora. Por Brujapiruja

Elvira García Aynat (1893-1981)

«Las personas que nunca se preocupan por sus antepasados jamás mirarán hacia la posteridad.»   Edmund Burke

Hoy he mirado atrás, he querido recordar a las mujeres que sembraron en mí el deseo de ser independiente, me dieron el impulso para creer que todas las posibilidades estaban a mi alcance, si ese era mi propósito, y me inculcaron el valor del esfuerzo, la paciencia y la perseverancia.

Ellas sí lucharon en tiempos muchos más difíciles en los que la legalidad vigente era un obstáculo determinante y aún así supieron encontrar el camino para ser mujeres, madres, trabajadoras, independientes y, en lo posible, libres.

Era el año 1957 cuando con casi ocho años tuve que irme a vivir con mi abuela Elvira a Madrid por circunstancias familiares. Mis primeros recuerdos están ligados a ella y su forma de encarar la vida. Para ella es hoy mi recuerdo agradecido.

Viuda a los 30 años con un hijo de seis, nunca quiso cobijarse en el entorno familiar acomodado y prefirió emprender un camino independiente que le permitiera mantenerse por sí misma y tomar sus propias decisiones. Sé, ahora pasado el tiempo, que algunas de sus hermanas y parte de su familia siempre le reprocharon esa osadía.

Estudió y se hizo Enfermera, ejercía como inspectora de sanidad y trabajaba vigilando y enseñando a la población menos favorecida de la España de la posguerra las normas de higiene elementales, velando por la salubridad de sus hogares y de la idoneidad de su alimentación. Yo la acompañaba muchas veces porque era demasiado pequeña para quedarme sola en casa y así quedó en mi pequeño cerebro grabada la imagen de una mujer profesional, que además era querida, respetada y admirada por quienes la trataban.

Ahora, cuando repaso muchas de mis actitudes, sé que ese ejemplo ha sido crucial en mi vida y la base que me ha sostenido en muchas dificultades.

También sé que en la historia de muchas de mis amigas, mujeres, madres y trabajadora, hay otras mujeres de generaciones anteriores que fueron el ejemplo a seguir.

Es una lucha sin pausa, generación tras generación y en esa lucha todas tenemos que poner un granito de arena. Espero dejar el mío como un peldañito más en la larga cadena generacional.

Brujapiruja

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3 comentarios

  1. Como nos influyen los abuelos

  2. Gracias Maite DBris, analizando los tiempos que vivieron es un m

  3. No tuve la suerte de conocerlos en vida, pero tambi

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