Díptico memorial (A Francisco de Quevedo y Villegas). Por Andariego


1
Mucho quisiera comprender del cielo,
que es el que rige la naturaleza,
la vida, los designios, la riqueza,
cuestionando el valor y el tono fiero.
Hoy firme en el recuerdo, aquí prefiero,
dejar que vuelen a través del viento,
tus obras, tus poemas, que ya siento
salir de mi interior con desconsuelo.
La poesía, ese arte inteligente,
recogida en formato de escritura,
desde un impulso al otro diligente,
navega en el misterio con soltura,
transmitiendo un sentido diferente,
según quién lo interprete en su lectura.

2
Tu poesía, hoy viva en la memoria,
de un tiempo oculto y una paz sincera,
muy lejos del sarcasmo, yo quisiera,
plasmar en esta página de historia.
Si frente a tanto orgullo seco y frío,
tan lleno de altivez y de arrogancia,
hubiera algún resquicio de esperanza,
a fe, que se encontró en tu desafío.
No juzgaré tu genio ni figura,
y menos tu carácter, ni tu brío,
ni hablaré de la rosa limpia y pura,
más te diré, que lejos de ese hastío
que vence o esclaviza, y que perdura,
siempre estarás Quevedo, al lado mío.

Andariego

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Un comentario

  1. Un bonito homenaje. Enhorabuena.)

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