11- Palabras de Dios a Ibn Arabi anciano. Por ¿Quién soy?

Hijo: me has visto en todos las parcelas,
no has cantado más dicha que la mía,
en Los engarces de Sabiduría (*)
me nombras, me promueves, me revelas.

Tus pies andando por las callejuelas
de Murcia, de Damasco y de Turquía
no buscaron jamás gloria vacía:
fuiste criatura de mi curatela.

Ha llegado tu hora, poeta amado,
tu verbo cristalino, esperanzado
florecerá en mi huerto y tendrá calma.

La luna siria te dirá el sendero
y más allá del cuerpo carcelero
hacia mi encuentro volará tu alma.

(*) Se refiere a Fusus al-Hikam (traducido como Los Engarces de Sabiduría o Los Engarces de la Sabiduría), una de las obras maestras de Ibn Arabi

4 comentarios:

  1. Un soneto lindisimo. La llamada al regazo de Dios.
    Suerte:)

  2. Cierto, un soneto impecable y muy hermoso. Buena poesía me encuentro en este premio, muy cuidada.
    Suerte

  3. Muchas gracias, Hilda.

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