185-Una noche, tres vidas. Por Arturo Antúnez
Tengo pis. No tengo ganas de hacer pis, pero tengo pis. Es decir, no tengo ganas de levantarme de la cama, con lo calentito que estoy aquí, para ir descalzo por el suelo frío del pasillo hasta el baño, y encender la luz blanca que me molesta en los ojos y bajarme los pantalones y soltar el chorro.