Adivina…adivinanza… Por Juan A Galisteo Luque

 

Bajo la fresca mata – el adivino-
lanza estridentes notas hacia el viento;
es su techo y su luz, el firmamento,
lo acompañan los sapos del camino.

No tiene instinto cruel, ni es traicionero,
vigila sigiloso en su maraña;
al mínimo sonido, él siempre extraña,
y es su vestido tinte carbonero.

Pequeño cantarín, que sin colores,
alegras los senderos… ¡Quién pudiera
lanzarlos como tú, de mil amores!

Si por siempre tu canto enmudeciera,
¡qué sería del campo y de las flores!
cuando empiece a brotar la primavera.
——–

Autor: Juan A Galisteo Luque 
Blog del autor.

Marcar el enlace permanente.

4 comentarios

  1. Me encanta el poema, pero debo estar espesa hoy porque no adivino. Ser

  2. Exactamente, es el grillo, un insecto que

No se admiten más comentarios