Amor empaquetado. Por Mar Solana


Acababan de disfrutar de un rato de sexo apasionado. Yacían uno al lado del otro, pletóricos de entusiasmo y de feromonas. Él fue a preparar café y ella siguió allí, decúbito supino y sin decir palabra; pasmada, con los ojos muy abiertos y fijos en un techo plagado de contraluces juguetones. Hinchada, con los pezones tan rosados y turgentes como al principio. Él regresó recién duchado y oliendo a empalagosa gomina. Le besó sus rojos y abultados labios y depositó una taza humeante en su mesita de noche. Cogió un elegante cartapacio y se marchó a trabajar. No había transcurrido ni una hora cuando se volvió a escuchar la puerta. Una mujer vestida de forma sencilla, con un pañuelo anudado a la cabeza, avanzó con soltura por la estancia. Al pasar por el dormitorio la vio allí, igual de inerte e inflada que otras veces. La cogió de las hinchadas y rosadas piernas y la arrastró fuera de la cama sin piedad. Movió con soltura sus dedos detrás del cuello de ella, como si ya lo hubiera hecho más veces, y de repente un ruido de globo deshinchándose inundó el silencio y aquella mujer, antes desplegada y sinuosa como carretera de montaña, se fue arrugando como una pasa.
? ¡Vamos, muñeca…debes volver a tu caja! Hay que ventilar esta
pocilga? masculló la mujer de la limpieza mientras sus labios dibujaban un gesto cómico y su cabeza se movía hacía ambos lados.

(*) Relato finalista en el III Premio Algazara de Microrrelatos y publicado en “Cuentos Alígeros” por la Editorial Hipálage.

Mar Solana
Blog de la autora

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6 comentarios

  1. mamria dolores
  2. Precioso relato. Es como un cuento de ni

  3. entr

  4. Genial

  5. Ya lo hab

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